Un cable de control es un cable utilizado en sistemas industriales y de automatización para transmitir señales de control, datos de medición, comandos de protección e instrucciones de automatización entre equipos, máquinas o paneles de control. Típicamente tiene múltiples núcleos aislados y puede incluir una capa de blindaje para reducir la interferencia.
Los cables de control se utilizan ampliamente en la automatización industrial, sistemas robóticos, paneles de control PLC, equipos mecánicos, ascensores, sistemas de alarma contra incendios y redes de control de edificios para garantizar una comunicación precisa de la señal y un funcionamiento coordinado.
Los cables de control transmiten señales de control y datos de bajo voltaje y típicamente tienen múltiples núcleos y una capa de blindaje; los cables de alimentación, por otro lado, transmiten alta corriente y se utilizan para accionar equipos mecánicos y eléctricos. Por lo tanto, su estructura, aislamiento y requisitos de aplicación difieren.
Los cables de control transmiten señales eléctricas desde dispositivos de control (como sensores o PLC) a otros dispositivos (como motores o relés). Estas señales indican cuándo el equipo arranca/para, cambia la configuración o envía retroalimentación operativa, lo que garantiza un funcionamiento automatizado y coordinado.
Los cables de control comunes incluyen:
Sí – Los cables de control típicamente incluyen una capa de blindaje (como una trenza de cobre o una lámina de cobre) para evitar interferencias electromagnéticas (EMI), lo que garantiza una transmisión de señal precisa y estable en entornos industriales ruidosos.
Los cables de control típicamente utilizan conductores de cobre finamente trenzados para mayor flexibilidad, aislamiento de PVC o PE para protección eléctrica y pueden incluir materiales de blindaje y una cubierta exterior protectora para una mayor durabilidad ambiental.
Los cables de control típicamente operan a bajos voltajes (generalmente alrededor de 450/750V) y están diseñados para aplicaciones de señalización y control, a diferencia de los cables de alimentación que típicamente soportan voltajes más altos.
La flexibilidad permite que los cables de control se instalen en espacios confinados, maquinaria móvil, sistemas de cadenas de cables y aplicaciones robóticas sin daños, lo que los hace ideales para entornos dinámicos y automatizados.
Para elegir el cable de control adecuado, considere los siguientes factores: recuento de conductores, requisitos de blindaje, condiciones ambientales (temperatura, aceite, humedad), flexibilidad requerida y cumplimiento de las normas eléctricas aplicables al sistema de control.